Según se pudo conocer, el joven de 18 años estaba limpiando la jaula de los cunaguaros, pero uno de ellos se escapó de la jaula de protección — que es para que los guardaparques al realizar este tipo de actividades las puedan hacer con tranquilidad— y lo atacó.
Tras el hecho, el joven fue auxiliado rápidamente por los otros guardaparques que se encontraban cerca y posteriormente fue llevado al hospital para que recibiera atención médica.
César no presentó mayores lesiones; sin embargo, tenía heridas en las manos y pecho provocadas por las garras del felino.
En el centro asistencial, los médicos de guardia le hicieron todos los exámenes correspondientes para determinar que las lesiones que había sufrido eran sólo superficiales y al curarle las heridas lo dieron de alta. Armando Gruber