El candidato a alcalde de Caroní asegura que la economía de Ciudad Guayana está muy afectada por la disminución en el consumo que tradicionalmente generaban los trabajadores de las empresas básicas.
Las utilidades generaron una gran frustración en los ciudadanos porque se fueron en el pago de las deudas de las tarjetas de crédito y la compra de comida, “sin alcanzar para las hallacas, el pan de jamón o el pernil navideño”, indica Wilson Castro, candidato a alcalde del municipio Caroní.
Considera que esta situación es otra de las dramáticas consecuencias que viven los venezolanos por la hiperinflación causada por las medidas económicas erróneas aplicadas por el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Castro comenta que la disminución en el poder de compra y la baja en el consumo se notan especialmente en Ciudad Guayana, porque la subsistencia del comercio de esta localidad está muy ligada a las utilidades de las empresas básicas: “En otra época se generaba un entusiasmo cada vez que les pagaban a los trabajadores, había consumo, se notaba un ambiente diferente en la calle”.
Recuerda que gran parte del personal de las empresas de Guayana utilizaba sus utilidades para comprar vehículos, cambiar de casa, organizar vacaciones, o hacer grandes inversiones, pero “todo eso quedó en el pasado, actualmente no les alcanza ni para invertir en la ropa de sus chamos”.
Explica que esto genera una economía que se mueve de manera casi exclusiva por los negocios ilegales del sur del estado, como la venta de gasolina, minería ilegal, venta de efectivo, etc.
Profesionales al exilio
Castro afirma que otro duro golpe al futuro del país es que producto de la pérdida del poder adquisitivo y la disminución en la calidad de vida, cientos de profesionales y trabajadores capacitados se van diariamente a buscar un mejor futuro para ellos y sus familias en otras latitudes. “Son años de formación, de práctica y talento que estamos perdiendo por culpa de las nefastas decisiones de quienes nos gobiernan”.
“Reiteramos a los trabajadores nuestra disposición a tenderles la mano, de buscar herramientas para aumentar su calidad de vida, y de que sean nuestra prioridad al momento de iniciar la reconstrucción de Guayana”.